La función autocompletar en Google, descrita en su página de ayuda, permite encontrar información rápidamente con unas predicciones de búsqueda, basadas en factores como las propias búsquedas del usuario,  la popularidad y la actualidad de los términos de búsqueda (lo que llama Google  La historia del momento). Cuando escribes una cadena de búsqueda, te aparece una lista de predicciones para completarla; el término que selecciones se incluirá en tu búsqueda. Las predicciones de búsqueda se generan automáticamente mediante un algoritmo y sin participación humana. Dicho algoritmo depende, de la frecuencia en la que otros usuarios buscaron un término pero también está diseñado para mostrar la diversidad de información disponible en la web, que se considera popular.  Recientemente el diario online “Público”, en su edición del 26/2/2018 mostraba, con el título “El mapa de los tópicos españoles, según Google” y escrito por Iñaki Berazaluce, qué palabras estaban habitualmente asociadas al autocompletador de Google cuando escribías “Los españoles son…”  y también por gentilicios autonómicos. Así descubríamos que, según la predicción de dicha función, los españoles son latinos, los gallegos tacaños, los vascos guapos, los andaluces gitanos, los cántabros falsos, los aragoneses los más altos de España, los murcianos mala gente, los catalanes judíos y los castellanos secos, entre otras lindezas. Qué deprimente. Estos adjetivos provienen de las búsquedas más populares, pero también de la información disponible en la web, no que en Google se califique así a nadie. Es un algoritmo de búsqueda que muestra los calificativos asociados. Y estas asociaciones de palabras cambian con el tiempo. Ello es importante, ya que los términos de actualidad influirán en un periodo determinado. El momento de la búsqueda para la redacción del presente artículo ha sido, principalmente, la primera semana de marzo de 2018.

¿Y si lo aplicamos a nuestra profesión?

La tentación es evidente. ¿Qué calificativos se asocian a nuestro colectivo? Con la búsqueda “Los geólogos son” (igual ocurre sin cambiamos el género) obtenemos un resultado que no estoy seguro que deba ser motivo de celebración. Somos primeramente borrachos, pero también científicos y bien pagados; incluso nos confunden con ingenieros. Pero ¿por qué somos borrachos? ¿Es cierta dicha premisa? Si accedemos a la búsqueda propuesta por Google, nos dirige a una serie de páginas cuyo contenido y temática no justifica dicha cadena de palabras ni la fama asociada. Hay un himno argentino titulado “la canción del Geólogo” y escrito por un “autor alcohólico anónimo” y unos vídeos subidos a youtube por unos estudiantes de geología, de juerga, con apenas centenares de visitas, pero poco más. Sin embargo en las imágenes de Google, aparece primeramente una empresa chilena que vende camisetas de “geólogo en apuros” con un logo ad-hoc muy descriptivo.

¿Los más sexys del mundo o es una exageración?

Rizando el rizo, modifiquemos algo la búsqueda. Si escribimos únicamente “Los geólogos” nos aparecen otros textos asociados. Según la cadena de búsqueda generada, tenemos buen sueldo, viajamos mucho, tenemos trabajo en Chile y tenemos una obsesión enfermiza con la ruptura de las rocas. Ah! Y seguimos siendo borrachos. Esto parece ser una verdad científica inmutable. Curiosamente, parece que en Chile, en el momento de la consulta, el profesional geólogo tiene proyección y mercado lo que influye en la búsqueda, de hecho sabemos que venden camisetas para geólogos y que, según el buscador, podemos tener trabajo allí ¿Será cierto?

Probemos con otra búsqueda: “trabajo de geólogo”. El resultado por orden es: España, Madrid, Chile, México, Canadá, Colombia, Perú, Argentina y Ecuador ¿Oferta o demanda? Básicamente son portales de ofertas de empleo. Y, de nuevo, Chile aparece destacado, como tercera opción.

¿Y si probamos con otros idiomas? En la búsqueda realizada, no aparece nada asociado al francés o alemán. En inglés, con las búsquedas “The geologists are” y “geologists are”, el autocompletado nos muestra primeramente que “the geologist are coming”. ¿Venimos, llegamos, de dónde? Lamento decepcionarles pero The geologist are coming es el título de una canción del grupo “The Amoeba People”, especialistas en canciones de corte geológico como su otro gran hit, según youtube, titulado “Continental Drift: Alfred Wegener”. La canción “The geologist are coming” es una especie de rap y fue subida a youtube el 12-3-16 acumulando, a principios de marzo de 2018, un total de 78.605 visitas. No son muchas para condicionar la búsqueda en Google. Curioso. Y curiosa es la letra de la mencionada canción, en la que se especula, con imaginación, cuál es el significado de cada letra de la palabra “geologist”. ¡Eso es amor a la profesión!

Otras afirmaciones, de esas que elevan nuestra moral corporativa a alturas cósmicas, son las que dicen que “geologist are the sexiest man alive” y “geologist are cool” ¿Pero… alguien lo dudaba? ¡Ingenieros, moriros de envidia! Pues no. Estas frases tiene su explicación y origen quizás en un episodio de la serie “American dad!” de Seth MacFarlane, en la que un apuesto geólogo de smoking (¡¡!!), ante el babeo de los personajes femeninos, aparece en la casa de los protagonistas para explicar el porqué del hundimiento del suelo. Y realmente ¿Somos cool? Quizás sí. Es un tema de ego. Al igual que con el concepto de borracho, la mayoría de estas expresiones afortunadas para un colectivo suelen acabar formando parte de camisetas, tazas y demás merchandising a juego. Realmente tenemos un ego que no nos merecemos ¿o será una frustración, un trauma por la ignorancia de nuestra existencia de la sociedad en general o simplemente porque no tenemos abuela? Y otro apunte, quizás alarmante, el concepto “geólogo” en todos los idiomas parece estar asociado únicamente al sexo masculino, vistas las páginas web y fotos asociadas ¿Machismo en diferido?

Capturas de pantalla de las diversas búsquedas y las opciones del autocompletador. Dichas búsquedas se realizaron principalmente a principios de marzo de 2018.
La camiseta denominada “Geólogo en apuros” fabricada por una empresa chilena (https://mangacorta.cl/shirt/13615-geologo-en-apuros) reflejo de esa leyenda urbana (o no) en la que se nos atribuye una querencia inusitada hacia las bebida alcohólicas. Junto a esta imagen, una captura procedente del video en youtube del grupo musical “The Amoeba People” en plena faena geológico-musical; pantalones negros, corbata estrecha y, sobretodo, camisa blanca no es un adecuado vestuario para el trabajo de campo, pero da un toque… En la parte inferior la letra original y traducida del tema “The geologists are coming”. Delirio geológico. ¿Efecto de los efluvios del alcohol?

Nuestro ego subido es un negocio para objetos de regalo y demás. https://www.spreadshirt.ca/i-m+the+cool+geologist+t-shirt-A11629180, https://www.etsy.com/market/funny_geology_mug, https://www.pinterest.es/digibloom/geologist-gifts/

También, según el autocompletado en inglés, los geólogos podemos ser muchas cosas más: extraños (weirds), ricos, inútiles (useless) y nuestro trabajo es divertido. Ciertamente, no pasamos desapercibidos.

¿Somos raros? ¿Inútiles? ¿Hay algo de verdad en ello?

El concepto de inutilidad también aparece en la búsqueda en italiano “I geologi sono inutili”. De hecho, es la única frase que aparece. Ciertamente alarmante ¿Éste es el concepto que tienen nuestros convecinos italianos de nosotros? La causa está en unas declaraciones realizadas por Luigi Di Maio (n.1986), líder del “Movimiento 5 Estrellas” y futurible primer ministro de la República Italiana, cuya profesión varía, en Wikipedia, según el idioma de consulta que emplees-azafato (español), agente de seguridad (francés) o steward (inglés) en el estadio de fútbol del Nápoles (curiosamente en italiano no se menciona esta ocupación)-  amén de camarero, periodista o técnico informático (de nuevo en otros idiomas se le califica de webmaster), pero político de moda, sin duda. En dichas declaraciones a la cadena televisiva italiana La 7 tildaba a los geólogos de inútiles o que no servían, lo que generó multitud de entradas y páginas relacionadas con el tema. Aunque posteriormente se disculpó, los antecedentes en internet condicionan el autocompletado de Google, así que, en italiano, los geólogos seremos inútiles por mucho tiempo. Grazie Luigi.

Escribamos “geólogo” o “El geólogo”. El autocompletado nos lleva a una temática gramatical (¿es diptongo o hiato?), a la ONG “Geólogos del Mundo” y a un desconocido (al menos para mí) “Geólogo Michael Acosta”. ¿Quién es? Dicho geólogo es el nombre ficticio del protagonista del filme “Gold” (2016), que se basa en una estafa minera real, en relación con un depósito masivo de oro descubierto en Indonesia allá en 1993, alterando las muestras ¡al añadir polvo de oro proveniente del raspado de la alianza matrimonial!

Cartel de la película Gold (2016) estrenada en España como “El Torrente dorado”. ¿Su título es un subliminal mensaje por el aspecto del protagonista, un irreconocible Matthew McConaughey, que nos recuerda al Torrente de Santiago Segura?. Sin embargo el geólogo es el del sombrero de paja. Menos mal.
Otras capturas de pantalla de las diversas búsquedas y las opciones del autocompletador. Dichas búsquedas se realizaron principalmente a principios de marzo de 2018.

Pero también se encuentra en la búsqueda a Charles Lyell, fundador de la geología moderna y a otro, también desconocido por mi parte, “geólogo William Ospina”. Sorpresa: ¡nos han dedicado un poema! Efectivamente, William Ospina, poeta colombiano (n.1954) pero no geólogo, es el autor del poema titulado “El Geólogo”, que aquí me permito reproducir:

Aquí hubo un mar hace un millón de años.

El hombre no lo sabe, más la piedra se acuerda.

Pártela: hay un cangrejo en sus entrañas,

todo de piedra ya, forma magnífica

que se negó a ser polvo.

Ante el peñasco y el guijarro, piensa

que acaso fueron seres dolorosos,

sangre y pulmones palpitantes.

Entre la ciega roca

y el trémolo extasiado de la salamandra

tan sólo hay tiempo.

Autor: William Ospina

(http://nadiesalvoelcrepusculo.blogspot.com.es/2015/01/el-geologo-william-ospina-colombia.html)

¿Y si buscamos por otros idiomas? Probando con las otras lenguas oficiales de España, tan solo aparece algo en catalán. A la palabra “geoleg” (también sin acento) nos aparece, misteriosamente, “Guillem Colom”. Este geólogo fue pionero y de gran importancia en las Illes Balears, pero su aparición en el autocompletado proviene de qué da nombre a una calle y las búsquedas están asociadas a la búsqueda de la misma. Misterio resuelto.

No aparecen referencias destacables si se busca por especialidades de la geología. Tan solo con la búsqueda “el paleontólogo” aparece vinculado “el paleontólogo más famoso” y “el paleontólogo más famoso del mundo” que corresponde, principalmente, a Jack Horner, el primer paleontólogo que descubrió evidencias en el registro fósil que indicaban cuidado parental de determinadas especies de dinosaurios y que fue inspiración del paleontólogo de “Parque Jurásico”. Pero también aparece otro paleontólogo, “Rolo el palentólogo” protagonista de una serie online argentina titulada “El Show Prehistórico” y destinada a público infantil, donde el paleontólogo Rolo Rotafolio, junto a unos peculiares compañeros, entrevistan a diversos animales prehistóricos, traídos al presente gracias a su máquina del tiempo, según se informa en youtube.

Capturas en youtube de vídeos que se muestra al geólogo sexy de American Dad! Rolo el paleontólogo  y a Sheldon (The Big Bang Theory), tras intimar con un libro de Geología durante una noche loca . Fotografía del filme “Cadena Perpetua (Frank Darabont, 1994) o como un martillo Estwing sirve para múltiples e imaginativos usos

¿Cómo se ve la geología según Google?

Empleando como palabras de búsqueda “la geologia es” y “geologia es”, aparte de referencias gramaticales, la geología como tal parece ser difícil y la carrera también, aunque es una buena carrera. Obviamente, estas asociaciones de palabras provienen de las búsquedas de usuarios interesados en cursar estudios universitarios de Geología. Curiosamente también hay búsquedas algo más preocupantes, por cuanto muestran dudas sobre el objeto y contenido de nuestra ciencia: así se busca si la geología es una ciencia, si es lo mismo que la geografía o la ingeniería geológica, si es una rama de la biología o si es una ciencia exacta. Antes estas asociaciones de palabras ¿Sabemos transmitir adecuadamente que es la geología y a qué nos dedicamos?

Otras capturas de pantalla de las búsquedas “geología es”/“la geologia es” y las opciones del autocompletador. Dichas búsquedas se realizaron principalmente a principios de marzo de 2018.

Pero también hay lugar a la chanza, por cuanto parece afirmarse “la geología es la kardashian de la ciencia”, concepto proveniente de la afirmación que realiza el personaje de Sheldon en la serie televisiva “Big Bang Theory”. Sheldon, prototipo del científico universitario elitista y friki, desprecia profundamente la geología y a los geólogos, por lo que siempre hace comentarios despreciativos tales como que la geología no es una ciencia real, o despierta tras una noche loca, desnudo en su cama ¡junto a un libro de geología! Pero existen más referencias cinéfilas. Así, en inglés, una cadena de búsqueda que aparece es “geology is the study of pressure and time”, proveniente del film “Cadena perpetua”, afirmación del protagonista, interpretado por Tim Robbins, injustamente encarcelado y aficionado a la geología, lo que le dará, con el tiempo, la paciencia y la imaginación, la libertad merecida.

Conclusión

Si atendemos al maravilloso autocompletador de búsquedas de Google, los geólogos somos borrachos, de una carrera que ni sabemos exactamente de qué trata, con futuro en Sudamérica, que además es difícil pero divertida, denostada y ridiculizada en algunas teleseries y filmes, aunque nos dedican algún poema. Y a pesar de todo, nos caracteriza un ego enorme, falta de ridículo y un autobombo que produce ingentes productos de merchandising para consumo propio. ¿Se sienten identificados?


Tierra y Tecnología nº 51 | http://dx.doi.org/10.21028/mmp.2018.03.19Autor: Marc Martínez Parra