La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, anunció ayer que el Gobierno regional sacará a Bolsa el 49% del Canal de Isabel II (la empresa pública encargada de la gestión del agua en Madrid) ‘para asegurar el futuro del agua en la región y dar la posibilidad a los madrileños de ser propietarios de su agua’.

Aparte de las inevitables comparaciones con la gestión en otras ciudades, como Barcelona, donde AGBAR es privada, quizás se debería reflexionar sobre el concepto de privatización aplicado a la gestión de un recurso público y a la vez de una sustancia de primera necesidad para la supervivencia, como es el agua.

En un principio, el agua, y en especial el agua subterránea, es de dominio público y lo seguirá siendo. Pero, de facto, se está privatizando al recurso y su uso futuro, poniéndolo en manos privadas.

Voy a hacer una lectura particular, nada seria y poco ortodoxa sobre el concepto de un bien como es la gestión del agua; por favor que nadie se ofenda:

1º) ¿Por qué no puedo, al igual que con el gas y la electricidad, comprar el agua a otras redes de distribución que no sean el canal de Isabel II- CYII? Si es gestión privada, ¿no se está favoreciendo a una única empresa? ¿eso es correcto?

2º)El Concepto de compra de agua no es real. Se trata, más bien, de un alquiler de la misma. Un ejemplo: en casa abro el grifo y uso el agua para lavar, beber , cocinar y asearme, por ello me cobran, por ejemplo, 2 euros/día; sin embargo yo devuelvo más de un 70 % al canal de Isabel II: se va por el fregadero, la salida de la lavadora y por la taza del váter y se la doy gratis, a mí el canal no me paga nada; es más, esa agua es tratada por el CYII y me la vuelven a cobrar, pongamos, 1 euro/día. Y luego se la venden a mi vecino y se inicia de nuevo el ciclo. Así en realidad yo ALQUILO EL AGUA un rato, la ensucio y el CYII la lava y me la vende otra vez. Y si el agua realmente es mía en un 70 %, ¿qué me da a mí la empresa gestora? ¿no me debería pagar algo porque se la estoy devolviendo?. He aquí la paradoja del ciclo hídrico aplicado a la gestión del agua: el agua que yo bebo y orino, vuelve a mí y me la vuelven a cobrar, como cantaban “Los Toreros Muertos” en “mi agüita amarilla”. Es el negocio redondo. Podríamos exigir que nos paguen a los usuarios un canon de reuso, o si no, la tiramos a la calle.

3º) ¿Pueden vender algo mío sin mi permiso? ¿ es eso privatizar?. Un ejemplo. Yo vivo en un pueblo con 20 vecinos. Nos pagamos un pozo y cada uno compra una parte de la bomba para montarla y extraer agua; yo pongo la manivela y el alcalde un tornillo, entre todos ponemos las tuberías y pagamos al manitas del pueblo para que la mantenga. El recibo del agua es por el gasto de energía y manutención. De pronto, al alcalde le da por privatizar la red, por decisión en Pleno. Se la vende al rico del pueblo y este nos cobra lo que quiere. Pero ¿cómo puede vender algo que no es suyo? De él es solo un tornillo de la bomba, y la manivela es mía, así que le exijo que me la devuelva. Más o menos, es lo que pasará en la Comunidad de Madrid. Con nuestros impuestos hemos pagado toda la inversión y por tanto, es nuestra. Éticamente no deberían poderla vender, aunque claro, ellos son nuestros representantes políticos pero también nuestros Administradores. Pues que nos pregunten.

4º) ¿Puede condicionar una empresa privada, que aprovisiona a 3 millones de personas, la planificación hidráulica de la Cuenca?

5º) ¿De quién son los embalses y los sondeos de agua subterránea? Si son públicos ¿pagará la empresa privada a la Comunidad por su uso y explotación?

6º) La venta del 49 % de la titularidad ¿revertirá en el usuario, que es el dueño de la Empresa? ¿Se le debería descontar dinero en la factura del agua? Al fin y al cabo, todos los ciudadanos madrileños somos los dueños y el Gobierno regional es un mero administrador. Por tanto, si se vende, quiero mi parte.

Espero que esta reflexión desenfadada lleve a otra más profunda. Estamos hablando de materias imprescindibles para la vida, como lo es el aire. ¿Cuál es el límite a la titularidad privada y el bien común? ¿se produce un enfrentamiento entre ambos o se complementan?