Texto y Fotos: Gabriel Chicote Alvira. Geólogo, Técnico de Senderos y Educador Ambiental. Licenciado en Geología por la UCM. http://dx.doi.org/10.21028/gca.2016.03.14

Si sumamos Turismo y Geológico el resultado es, sin lugar a dudas, El Cañón de Ordesa en los Pirineos oscenses.

Ha sido catalogado como uno de los lugares más bellos del mundo y la razón principal no es su fauna y tampoco por su variada flora si no su espectacular paisaje geológico.
Ha sido catalogado como uno de los lugares más bellos del mundo y la razón principal no es su fauna y tampoco por su variada flora si no su espectacular paisaje geológico.

Un cañón con más de 15 kilómetros de longitud protegido por unas impresionantes paredes calizas de más de 800 metros de altura y que termina en el Circo de Soaso y en la famosa Cola de Caballo.

Perfil geológico y columna cronoestratigráfica del Cañón de Ordesa. MAGNA HOJA 178 BROTO. IGME.

Perfil geológico y columna cronoestratigráfica del Cañón de Ordesa. MAGNA HOJA 178 BROTO. IGME.
Perfil geológico y columna cronoestratigráfica del Cañón de Ordesa. MAGNA HOJA 178 BROTO. IGME.

Situado dentro del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido fue catalogado como Reserva de la Biosfera en 1977 y como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1997. Declarado como Parque Nacional en agosto de 1918, el segundo más antiguo del territorio español, su espectacularidad ha atraído a millones de turistas para transitar por él disfrutando de uno de los paisajes más sobrecogedores que existen. Algunos de sus visitantes son tan ilustres como Sir Charles Lyell, uno de los padres de la geología moderna y que en 1830 recorrió el Macizo de Monte Perdido estudiando su geología.

Por mucho que hayas leído o te hayan contado, la primera vez que pisas este cañón es de esos recuerdos que se quedan en tu memoria para toda la vida.
Por mucho que hayas leído o te hayan contado, la primera vez que pisas este cañón es de esos recuerdos que se quedan en tu memoria para toda la vida.

Roca y agua, agua y roca y toda la gama de colores según la época del año, la vegetación y la altura a la que te encuentres.

Pero ante todo roca y más roca y el hueco que dejaron algunas rocas, que a veces es más importante que la roca en sí misma.
Pero ante todo roca y más roca y el hueco que dejaron algunas rocas, que a veces es más importante que la roca en sí misma.

Por todos los lados, mires donde mires y vayas a donde vayas, aquí la geología está por encima de todo. Calizas masivas, nodulares, areniscas, fallas, pliegues, cabalgamientos, tobas, cascadas vertiginosas, gradas, cañones, torrentes, lapiaces, canchales, circos glaciares, morrenas, etc.

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Calizas del Estrecho, Areniscas de Marboré, Calizas de Salarons o Calizas de Gallinera son los nombres de las principales unidades estratigráficas que junto con topónimos como Cascada de Arripas, Gradas de Soaso o Cola de caballo nos acompañarán durante todo nuestro recorrido por el fondo de este impresionante cañón.

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La Ruta

“50 millones de años en 9 kilómetros andando”

Ese es el intervalo de tiempo que tardaron en depositarse los materiales que vamos a recorrer. Posteriormente se plegaron y los erosionaron los glaciares y los ríos de tal forma que crearon el portentoso paisaje que vamos a descubrir durante nuestro paseo.

El inicio: Bajarse del autobús en la Pradera de Ordesa me supone siempre un ejercicio de modestia y pleitesía hacia la “Madre gea”. El espectacular paisaje que forman las paredes del cañón, más de ochocientos metros de material calcáreo vertical, me hace sentir muy pequeño y mis sentidos se preparan para poder recibir y disfrutar de uno de los lugares más bellos del mundo.

El Tozal del Mallo o la Pared de Gallinero son términos que nos hablan de la verticalidad de los materiales.
El Tozal del Mallo o la Pared de Gallinero son términos que nos hablan de la verticalidad de los materiales.

Estirar y calentar en la Pradera y comenzamos nuestro recorrido siguiendo siempre las indicaciones hacia la Cola de caballo. La pista es ancha y regular y transita cercana a la orilla derecha del río Arazas, hábitat de fuertes truchas, juguetonas nutrias y del mítico desmán de los pirineos. Las aguas de este río son las que al precipitarse al vacio van a formar las cascadas que son una de las “marcas” de esta ruta.

Los saltos de agua: Tras 45 minutos de paseo, al principio por los prados y posteriormente por un abetal situado en el cono de deyección del Barranco de Cotatuero y que cuenta con ejemplares de decenas de metros de altura, comenzamos a ascender ligeramente y a oír el rumor del agua al chocar contra la roca, la Cascada de Arripas, nuestra primera parada ya se vislumbra entre los árboles.

Una breve pausa para la foto de rigor y rellenar la cantimplora en la fuente permite que nos vayamos “acostumbrando” un poco más a este sobrecogedor paisaje.
Una breve pausa para la foto de rigor y rellenar la cantimplora en la fuente permite que nos vayamos “acostumbrando” un poco más a este sobrecogedor paisaje.

Continuamos la marcha y la pista se hace un poco más empinada, los abetos han ido dejando paso al hayedo y la cascada de Arripas sólo ha sido un aperitivo de las que nos vamos a encontrar ahora, las Cascadas de la Cueva y del Estrecho. Todas ellas “saltos” que debe realizar el Arazas para flanquear el resalte rocoso que representan las Calizas del Estrecho. El número de miradores existentes para poder disfrutarlas habla a las claras de su tamaño y atractivo paisajístico.

Fotos a las cascadas, repaso a las rocas adyacentes, destacando la presencia de unas estructuras “raras” que recuerdan tubos o embudos –los rudistas- y otra vez a la pista. Transcurrimos por la transición de las Calizas del Estrecho hacia las Areniscas de Marboré  y el bosque de hayas va dejando paso a praderíos. La vegetación que nos rodea cambia radicalmente y si estamos en primavera o verano podremos observar cientos de tipos distintos de flores con una gran variedad de colores y formas.

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Los escalones o gradas: Paso a paso llegamos a una serie de cascadas encadenadas denominadas la Gradas de Soaso que ya nos anticipan lo que vendrá después y en las que el agua va descendiendo una a una las distintas capas que forman las Areniscas de Marboré.

Las Gradas de Soaso siempre merecen un alto en el camino.
Las Gradas de Soaso siempre merecen un alto en el camino.

Bienvenidos al mayor espectáculo del mundo: Superadas las Gradas de Soaso el camino se vuelve prácticamente llano y discurre hacia el Circo de Soaso donde las aguas de varias surgencias cársticas se irán uniendo al Arazas formando, en su corto recorrido por las laderas del valle, bellas cascadas.

Todo se ve minimizado por la presencia, al fondo del valle, de las Tres Sorores o lo que es lo mismo El Macizo de Monte perdido (Cilindro Marboré, Monte Perdido y Sum de Ramond o Pico Añisclo), el “edificio” calcáreo de mayor potencia de Europa Occidental que llega hasta una cota de 3355 m, siendo la tercera cima más alta de los Pirineos.

El Circo de Soaso con la “invisible” Cola de Caballo y al fondo Monte perdido y el Pico Añisclo.
El Circo de Soaso con la “invisible” Cola de Caballo y al fondo Monte perdido y el Pico Añisclo.

Lo más curioso es que en este punto sabes que no te queda más de media hora de camino, crees ver claramente el cierre del cañón y la famosa Cola de Caballo no aparece por ningún lado. ¡Paciencia! llevas casi tres horas de camino recorriendo unos 50 millones de años de historia geológica y no es el momento de impacientarse.

El río Arazas en la llanura de Soaso con meandros y barras que le dan un aspecto trenzado en ocasiones.
El río Arazas en la llanura de Soaso con meandros y barras que le dan un aspecto trenzado en ocasiones.

Cuando ya prácticamente damos por definitivo que lo de la Cola de Caballo es un bulo, perfectamente guardado por los millones de excursionistas que nos han precedido durante siglos, damos un ligero giro a la izquierda y aparece uno de los saltos de agua que más me ha impresionado en los años que llevo rodando por los senderos, la Cola de Caballo.

Los miles de hilos de agua que forma la Cola de caballo en su base es lo que le da el aspecto por el que obtuvo su nombre.
Los miles de hilos de agua que forma la Cola de caballo en su base es lo que le da el aspecto por el que obtuvo su nombre.

El objetivo final de nuestra ruta ya está conseguido, qué mejor que celebrarlo con un buen bocata al pie de la cascada disfrutando de todo lo que nos rodea y acompañados del sonido de las aguas que caen desde decenas de metros de altura.

El retorno: La vuelta por el mismo camino y sin paradas “turísticas” supondrá unas dos horas pero mi consejo es que, si el clima acompaña, lo hagáis tranquilamente, disfrutando de cada rincón de este precioso entorno. ¡Qué pocas veces en tu vida descubrirás otro sitio como este y nunca se sabe cuándo podrás volver!

En definitiva: Un recorrido poco exigente, rocas, fósiles, depósitos y huellas glaciares, cascadas, pliegues y algunas de las montañas más famosas del alpinismo europeo.

Esto es lo que te acompañará durante esta ruta, motivos para hacerla no te faltan ¡Viva la Geología!


Información útil

Dificultad: Baja. Apta para todos los públicos.

Longitud: 18 Kilómetros (ida y vuelta)

Desnivel: 440 m.

Punto de partida y llegada: Aparcamiento de la Pradera en el valle de Ordesa.

Cota máxima: 1760 m. Circo de Soaso.

Cota mínima: 1320 m. Pradera de Ordesa.

Época del año para realizarla: De primavera a otoño. Mucha precaución con las tormentas, dentro del cañón son una de las experiencias más sobrecogedoras que puedas tener.

Situación: En el norte de la provincia de Huesca, en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.

Población más cercana: Torla.

Cómo llegar: Por la carretera nacional 260 desde Sabiñanigo por Yebra de Basa hasta Fiscal y pasado Broto coger el desvío a la derecha hacia Torla. Allí, en el Centro de Visitantes del Parque Nacional de Ordesa y Monte perdido, existe aparcamiento y servicio de autobuses en verano y temporada alta. Se puede subir con coche particular a la pradera el resto del año.

Cartografía: Ed. Alpina “Ordesa y Monte Perdido”.

Geológica: MAGNA hoja 178 BROTO | MAGNA hoja 146 BUJARUELO

Lugares donde informarte:

  • Centro de Visitantes de Torla.

Avenida Ordesa s/n.

22376 Torla.

Tfno: 974486472

  • Punto de información en la Pradera de Ordesa.

Avituallamiento: En la localidad de Torla hay varias tiendas y restaurantes y en la misma Pradera hay un bar donde puedes comer y una tienda con algo de material de montaña, mapas y recuerdos.

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La Brecha de Roland, el Casco, el Circo de Cotatuero y su cascada de más de 150 metros de altura forman un conjunto paisajístico digno de ser admirados por cualquier visitante.

Si durante el recorrido levantas la vista podrás atisbar a tu derecha, a mitad de pared, la faja de Pelay por donde transita la famosa Senda de los Cazadores.

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Un recorrido más aéreo que el nuestro por donde se puede disfrutar de otra perspectiva de este maravilloso cañón pero que resulta más exigente físicamente hablando puesto que debe salvar un desnivel de 650 metros desde la Pradera de Ordesa hasta el Mirador de Calcilarruego por una zigzagueante senda a modo de empinadas escaleras.

ordesa_17_2016Las Calizas del Estrecho se caracterizan por la presencia de abundantes fósiles de rudistas (Hippurites) que fueron un tipo de moluscos pelecípodos bivalvos con una de sus valvas mucho menor que la otra y que se extinguieron en el paso del Cretácico al Terciario al igual que los dinosaurios.

El término rudista, se debe a J. B. Lamarkc que lo usó por primera vez en 1817 refiriéndose a “…un grupo extraño de conchas que parecen tener alguna semejanza con los Ostráceos”. La raíz del término, rudis, proviene del latín y significa tosco, rudo o rugoso, lo que ilustra muy bien la apariencia de las conchas de los rudistas.

Las Areniscas de Marboré están formadas por potentes y compactas capas de areniscas con abundantes fósiles de animales unicelulares marinos llamados foraminíferos que habitaron las aguas de los mares del Cretácico Superior.

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El Monte Perdido o cómo conseguir 3355 metros de altura a base de pliegues y cabalgamientos.

La tercera cima más alta de los pirineos se “formó” debido a las fuerzas compresivas de la orogenia alpina que fueron plegando y apilando los estratos calizos que se habían formado en los mares del cretácico y principios del terciario, de tal manera que kilómetros de materiales que inicialmente estaban dispuestos horizontalmente se acumularon en la vertical formando este mítico pico.

 

Perfil geológico y columna cronoestratigráfica de Monte Perdido. MAGNA HOJA 146 BUJARUELO. IGME.

 

Perfil geológico y columna cronoestratigráfica de Monte Perdido. MAGNA HOJA 146 BUJARUELO. IGME.
Perfil geológico y columna cronoestratigráfica de Monte Perdido. MAGNA HOJA 146 BUJARUELO. IGME.

Un Cuaternario mod-helador

Durante el Cuaternario se produjeron varios periodos de frío extremo que facilitaron la presencia de gigantescos glaciares que ocuparon extensas zonas de los Pirineos y que modelaron de forma asombrosa el relieve.
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El Circo de Cotatuero, el de Soaso o las morrenas son algunos de los vestigios que dejaron estos glaciares y que nos permiten imaginar cómo debió de ser este paisaje hace 65000 años.

Enlaces de Internet de interés

Para ir bien informado sobre el Cañón y sus alrededores:

http://www.igme.es/LibrosE/GuiasGeo/ordesa_sp/index.html

http://www.magrama.gob.es/es/red-parques-nacionales/nuestros-parques/ordesa/guia-visitante/

http://www.geoparquepirineos.com/